Hotel Ohla Barcelona

David Borrallo • Google

La fachada del hotel Ohla Barcelona, en plena Via Laietana, se ha convertido en un hito visual de la ciudad contemporánea. El edificio, rehabilitado por el arquitecto Alfonso Milá en su origen y transformado más tarde por el estudio Alonso Balaguer Arquitectos Asociados, es un ejemplo de cómo el diseño actual puede dialogar con un entorno urbano cargado de historia. El elemento más llamativo de la fachada es la intervención del artista Frederic Amat, cuyas cerámicas en forma de ojos crean una superficie inquietante y poética que convierte el volumen en un lienzo vivo. Este gesto plástico rompe con la rigidez tradicional de las fachadas de Via Laietana, avenida concebida a principios del siglo XX como eje de modernización urbanística. La calle suele estar marcada por una arquitectura de corte monumentalista, vinculada al eclecticismo y al noucentisme, pero el Ohla introduce una vibración distinta, casi surreal, que se aparta de la retórica clasicista y despierta la curiosidad del transeúnte. Los ojos, distribuidos aparentemente de forma azarosa, recuerdan al visitante que la ciudad observa y es observada.

Cristina Pampin • Google

Ayer, tuve una experiencia lamentable en la terraza del Hotel Ohla Barcelona, un hotel boutique de lujo con 5 estrellas que conozco bien desde hace años. Tenía una reunión de trabajo y en general estoy dispuesta a pagar tres veces el precio habitual por dos Aperols y disfrutar de las vistas, lo que no tolero es el trato extremadamente irrespetuoso y agresivo. Después de una hora, me pidieron que me fuera de una forma horrible porque no quería consumir más en ese momento. He trabajado con el hotel en el pasado y nunca imaginé recibir un trato tan inadecuado. Entiendo las dificultades del personal en la hostelería, pero la política de empresa y el trato grosero por parte de los empleados me parecen completamente inaceptables. Me avergonzó especialmente la situación. Este tipo de actitud no debería permitirse en un establecimiento de este nivel. Procederé a presentar una queja formal, ya que el trato hacia los clientes debe ser respetuoso, independientemente de si son turistas o clientes locales.

Jesús Núñez • Google

Es la segunda vez que visitamos la terraza para tomar algo. Ayer nos invitaron a irnos 5 veces preguntándonos si íbamos a tomar algo más repetidas veces. Anotar que tomamos 4 consumiciones en muy poco tiempo y en un momento una camarera recogiendo la mesa se llevaba ya un Gyn tonic que estaba a medias a consumir. Entiendo que lo que buscan es llenar las mesas con turistas que consumen y esperan pero deberían también cuidar a los clientes locales. No volveremos, hay mas terrazas en Barcelona y sin tanta presión y poca amabilidad.

Jifang Yin • Google

No es lo mejor forma parkar coche. Mejor solo con taxi. La terraza es bonita. Con caridad y precio a su calidad...

Sonia Muñoz Jiménez • Google

No era la 1era vez que iba a la terraza a tomar algo.Hoy concretamente he pedido un MARGARITA, y sin entrar en el precio (excesivo) la mala calidad!!.Nefasto!!Informo a camarera y me deriva a hacer reclamación, 1ero a un señor que es el que cobra y reconoce que es así "para guiris".Pago y procedo a hacer la reclamación por escrito, tal como me indican además, pues la atención como si fuera de "broma" o normal que pase.Y para solicitarla nos atiende una tal HELENA jefa de ..que en lugar de escuchar la queja, mejorar producto y nada empática, eso si algo nerviosa.Indica que es cuestión de gusto y que la reclamación por escrito la llevaré yo a consumo que ella NO , que ahí se queda.!!!Fatal trato.Pocas ganas de atender y trabajar bien.NADA RECOMENDADO.TOMADURA DE PELO.